En busca de Ghalib
por: María Helena Barrera-Agarwal
Es un marzo extrañamente primaveral en Delhi. Tiempo ideal para explorar los recovecos de sus antiguos barrios, en busca de las huellas del poeta Mirza Ghalib. El laberinto de callejuelas se empeña en resguardar sus secretos. Descubrir la haveli (residencia) de Ghalib y luego su tumba implica constancia. Alcanzarlas, empero, es amplia recompensa: en la espartana simplicidad de ambas –cerca de otros peregrinos del mismo empeño– parecen resonar los versos del anciano vate: “Ghalib murió hace tiempo pero aún recordamos sus preguntas / ¿Qué fui antes? ¿Dónde me habría hallado si no hubiese nacido?”
