Lo que tenemos de insondable

por: Leonardo Valencia

De la librería a la biblioteca personal vamos en un solo sentido, acumulando libros. A veces, por casualidad, si escribimos, podemos llevar uno o dos a la librería. Pero el trayecto es de dirección única. Error del consumo: ya es inagotable nuestra biblioteca sin relecturas. Condenados a querer leerlo todo, somos insaciables en medio de un granero. Aún así, quién puede explicar el hambre y la sed, sus pozos sin fondo, que nos lanzan más allá del hambre y de la sed. Nuestro derroche, nuestra voracidad, son señales de lo que tenemos de insondable.



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