Editorial: El hombre que supo desaparecer
He seguido a Maurice Blanchot en castellano, desde las antiguas ediciones de Pre-Textos y Monte Ávila. Temí que desaparecerían por la resistencia poética que oponen al circuito rápido de la literatura, por su densidad estilística. Me equivoqué, afortunadamente. Editoriales como Pre-Textos, Arena y Trotta lo ofrecen, de manera sostenida, como refugios de resistencia. A ellos nuestras felicitaciones. Recuerdo que visité en Mesnil Saint-Deni su tumba, que comparte con Anne, su mujer: Lux-Amor está inscrito allí. No hay más. El resto hay que encontrarlo en sus libros y en el espacio, más allá, de la escritura, donde hay que desaparecer.
Magdalena Martínez R.
Directora
mmr@comunidadinconfesable.com
Comparto tu gusto por Maurice Blanchot, le sigo desde hace tiempo y añado por si te interesa o interesa a algún lector/a la editorial Tecnos además de Pre-Textos,Arena,Trotta, ya que a veces lo que no se encuentra en una se halla en otra.
De Maurice Blanchot siempre me ha interesado esa intensidad poética, intensidad extrema de su pensamiento, esa profundidad que produce tal impacto en el lector , que sobreviene algo así como un gran silencio, una ausencia cargada de sentido, un estado de shock, una desocupación en la que desaparece el lenguaje conocido para dar paso a un vacío en el que nacer a otro nombrar, a otra interrogación fuera de las rutas al uso.
un cordial saludo
y enhorabuena por la revista
Julia Otxoa